¡Invasión! ~ [Gabrielle, Charlotte y Christine]

Tomé el esmalte que me daba Gab y lo guardé en mi pequeño bolsito con pinturas. Guardé también el esmalte negro, ya había acabado y ahora debía esperar a que la pintura se secara.
- ¡Uhhh!, yo se de quien hablan... - dije con voz cantarina mientras sonreia complice con Christine, no me extrañaba que todas tuvieran admiradores

Off: xDD Sorry! me había olvidado del tema... u,u pero aquí estoy

Como si de un juego de ping pong se tratase, miré a Charlotte, la cuál al igual que yo había terminado de pintarse las uñas, para luego mirar a Christine y volver a mirar a Charlotte. Fruncí el ceño, ¡Odiaba ser tan despistada!

-¿Hay algo que no sé? - Inquirí al ver la sonrisa en el rostro de Charlie. ¿De qué o quién rayos hablaban?

Off: No problem xD

Asentí a lo que decía Christy - ¡Vamos Gab!, si sabes de lo que estamos hablando - dije mirandola con cara de suplica, para que de una vez por todas lo admitiera. Era bastante obvio, ella y su mejor amigo pasaban la mayor parte del día juntos. - Pero si aun no tienes idea, podemos ayudarte dandote algunas pistas - sonreí entusiasmada con la idea

Escuché a Christine y alcé una ceja.

-Bueno, no sería la primera vez que algún chico cae enamorado de alguna - Comenté encogiendome de hombros.

Giré mi rostro hacia Charlotte cuando habló, reí entre dientes ante su cara de suplica, cuando caí en la cuenta de lo que había dicho, volví a fruncir el ceño - ¿Yo lo sé? - Inquirí llévandome una mano a la cabeza, en señal de que no tenía idea de quién estaba hablando.

Volví a mirar a Christine cuando mencionó una pista, ¿Por qué yo estaba implicada en aquel "Jueguecito" y Pauline no?, miré a mi melliza con cara de interrogación.

- ¡¿Por qué no lo dicen de una vez y ya?! - Exclamé haciendo aspavamientos con las manos. ¿Alto y de ojos claros? umm...

Negué infantil a su última exclamación - Otra pista... lo conoces mejor que todas nosotras juntas - sonreí mordiendome el labio inferior mientras movía la cabeza para todos lados - Y creo que ya está, lo habrás adivinado - me encogí de hombros mirando a Christy y a Pauline. Moví los dedos de mis pies, el esmalte ya se había secado por completo

Ugh... odiaba el jueguito de las adivinanzas, ¿lo conocía mejor que a todas ellas juntas?. Sacudí la cabeza mientras me rascaba despreocupadamente el cabello.

-Chicas, en serio que no sé de quién están hablando - Murmuré frustrada. Odiaba ser tan despistada.

Miré a Christine cuando mencionó que la situación perdería la gracia si decían de quién se trataba, negué con la cabeza justo en el momento en que mis neuronas parecían hacer conexión. Un momento...

-¿No estarán hablando de Daniel, o si? - Pregunté insegura. ¿A Daniel le gustaba alguna de mis hermanas?, fruncí los labios hasta formar una línea en mi rostro.

¿A Daniel le gustaba una de mis hermanas?... Aquella pregunta me la hacía una y otra vez mientras apretaba los labios aún más. Salí de mi ensoñación cuando escuché a Christine, parpadeé varias veces seguidas antes de hablar.

- ¿Por qué crees que a Daniel le gusta alguna de ustedes? - Pregunté dirigiéndome a Christine para luego mirar a Charlie sin cambiar la expresión de mi rostro. Creo que iba a estar seria por un buen rato.

Rodé los ojos y me levanté de la alfombra - ¡Por Dios Gab!, no le gusta ni Paulie, ni Christy ni yo.. - exclamé como si fuera lo más obvio, ¿cómo no se había dado cuenta?. Daniel no pasaba casi nada de tiempo con nosotras a excepción de Gab, habría sido una locura imaginarlo sin ella. - Así que... ¿qué hay entre ustedes? - me senté en la cama junto a Christy, me intrigaba saber más sobre la vida sentimental de mis hermanas

-Ni Pauline, ni Christy ni tú - Murmuré frunciendo el ceño.

Osea que...¿Teníamos una quinta hermana?. Reí entre dientes ante aquella estúpida suposición. Pensé en lo que dijo Charlotte justo cuando escuché preguntar que había entre él y yo, me sonrojé y bajé el rostro, en ese momento me parecían muy interesantes mis pies.

-Nada - Respondí sin hacer contacto visual - Sólo somos... ya sabes, amigos - Agregué intentando apaciguar el sonrojo de mis mejillas.

Bufé ante la aparentemente inocente respuesta de Gabrielle. Había estado callada durante el juego de "¿adivina quién?" pues sabía que si abría la boca le gritaría el nombre alos cuatro vientos.
-Melli, por favor -le pedí mirándola con una media sonrisa. No nos podía mentir, y si no había nada, definitivamente el uno estaba loco por el otro.

Desvié mi vista al escuchar el bufido de Pauline, me puse de pie y me dirigí a la ventana, dándole la espalda a mis tres hermanas.
Me quedé en silencio un buen rato al escuchar la súplica de mi melliza, giré la mitad de mi cuerpo, aún con las mejillas sonrosadas ante el tema que estabamos manteniendo.

- ¡Es verdad! - Exclamé mirando a mis hermanas de forma intermitente - Nos queremos mucho.. pero como amigos - Mentí... Bueno, en parte era mitad verdad, él me apreciaba a mi como a una hermana.